Fitxa bibliogràfica / Ficha bibliográfica
Signatura N Fer
Classificació 834B.40"19"
Autor Fernández, Marcial
Títol Andy Watson, contador de historias /
por Marcial Fernández ; prólogo de José de la Colina
Edició 3ª ed. corr. y aum.
Publicació México : Ficticia, 2005
Descripció física 141 p. ; 21 cm
Col·lecció Biblioteca de cuento Anís del Mono ; 22
ISBN / ISSN 9789685382380
Matèria Microrelats
Andy Watson, contador de historias
Se castigaba con severidad a todo aquel que escribiera una mala historia.
Andy Watson supo de este ajusticiamiento: luego de publicar su primera novela, misma que era aburridísima, los soldados del emperador simplemente le cortaron las manos.
Los revisteros de moda reseñaron el hecho. Dijeron que Watson sería siempre -de permitírsele seguir escribiendo- un pésimo escritor, y se olvidaron de su nombre.
Andy Watson, sin embargo, aprendió a escribir con los pies y publicó otro libro. La ley, en esta ocasión, de nueva cuenta fue implacable: le cortaron las piernas.
Watson ya no publicaría más obras. En cambio gustó de contar cuentos, invariablemente insulsos, en el ágora del pueblo. Todos los que por casualidad lo oían, temorosos de perder las orejas -según el más reciente decreto-, le arrancaron la lengua.
Hoy, lo único que hace es tomar el sol en una banca del parque, y quien lo mira, piensa inevitablemente en una buena historia...
Marcial Fernández
Fitxa bibliogràfica / Ficha bibliográfica
Signatura N Fer
Classificació 834B.40"19"
Autor Fernández, Marcial
Títol Un Colibrí es el corazón de un dios que levita / Marcial Fernández
Publicació México : Ficticia, 2014
Descripció física 212 p. ; 17 cm
Col·lecció El Gabinete de curiosidades de Meister Floh
ISBN / ISSN 9786075210414
Matèria Microrelats
Secuestro
Creí ganarles la partida, pero los secuestradores arruinaron mi matrimonio. Desde el día del plagio fui paciente en la negociación. Recibí de los criminales una oreja. Luego, un dedo, un pie, la mano y poco a poco la reconstruí. Cuando los delicuentes se percataron de su error, no quisieron entregar la última pieza. Mi esposa, entonces, se volvió fría, distante, ajena a cualquier sentimiento, una mujer sin corazón.
Marcial Fernández