dissabte, 20 de juny del 2015

NOVETAT A LA MICROBIBLIOTECA / NOVEDAD EN LA MICROBIBLIOTECA (57)








Fitxa bibliogràfica / Ficha bibliográfica

Signatura                    N Olg
Classificació                834.4"19"
Autor                          Olgoso, Ángel
Títol                            Breviario negro / Ángel Olgoso
Publicació                   Palencia : Menoscuarto, 2015
Descripció física          156 p. ; 21 cm
Col·lecció                    Reloj de arena (Menoscuarto) ; 71
ISBN / ISSN                9788415740216









*Il·lustració / Ilustración de Gabi Beltrán.



La técnica de soñar monstruos

A Alfonso Cost

A fuerza de soñar un monstruo, el monstruo nace. Cuando era muy pequeño tenía siempre la misma pesadilla: algo, amenazador y espeluznante, vivía agazapado en el fondo del pajar, bajo la vieja azotea. Yo salía de mi dormitorio en la planta de arriba y descubría, en su corredor en penumbra, la puerta entornada que daba al pajar vacío, cavernoso. Con el pánico ya en las entrañas, intentaba cerrarla desesperadamente pero notaba que mi gesto me delataba, que su olfato me advertía. Entonces huía, volaba escaleras abajo con eso persiguiéndome resollante, mugidor. Sentía la rémora de mis piernas y creía que el voraz inquilino me alcanzaba, me apresaba, me hendía, me desollaba. Carecía de atributos concretos. Era una sombra veloz y exacerbada, un toro, una gigantesca araña, un cárabo nocturno de ojos desorbitados. Podía tener cuernos, cerdas erizadas, pico o garras. Los miembros me latían como corazones, el corazón me hormigueaba, ululaba el aire en mis diminutas fosas nasales. Resbalando sobre los jugos negros y pegajosos de los escalones, respirando su hedor a fango fluvial, llegaba jadeante al pasillo iluminado de la planta de abajo y sabía que por fin estaba a salvo. Siempre el mismo sueño, una noche y otra noche, reiterado, inextinguible.
Un buen día, cuando tuve uso de razón, lo ví frente a mí en el comedor. Había cruzado la frontera, había nacido, arrancado de la oscuridad, de la incesante digestión de los sueños. Estaba ahí, en una silla, de manera tangible, perfecta, con su ahora sólida presencia transferida a este orbe y ocupando el aire, estableciéndose sin miramientos en mi hogar. Temblé al reconocerlo. Él me observó con atroz indiferencia. Pero también supe que ni a los monstruos les conviene estar solos. Desde entonces no volvió a repetirse la pesadilla y, para dormir, cuenta ovejas que saltan ordenadamente la cerca. Desde entonces aquel monstruo vive conmigo y, para dormir descuidado, hasta le puse un nombre: Padre.

Ángel Olgoso






I acompanya aquesta entrada de novetats del blog de La Microbiblioteca la gravació de tres contes breus inclosos al llibre gentilesa de l'autor i llegits per Roberto Martínez Mancebo. Moltes gràcies a tots dos.




Y acompaña a esta entrada de novedades del blog de La Microbiblioteca la grabación de tres cuentos breves incluïdos en el libro gentileza del autor y leídos por Roberto Martínez Mancebo. Muchas gracias a los dos.





Ars topiaria



Ángel Olgoso




Las huellas de los pájaros en el aire



Ángel Olgoso




El palacio de las imaginaciones



Ángel Olgoso